EL POR QUÉ DE ESTE BLOG

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Bueno, bueno, bueno, pues se explica en pocas palabras: ESTOY EN EL PARO.

Si, después de 34 años trabajando, ahora estoy en el paro y como la cosa me temo que va pa´ largo, pues tengo que fogá, ¿sabéis lo que es eso?, pues que necesito algo que hacer para quemar energía.

Trabajando en hostelería, tratas con todo tipo de personas al cabo del día, clientes y compañeros de trabajo, y si además la mayoría son mujeres, que somos muy charlatanas y llevamos muchos años trabajando juntas, filosofamos mucho de familia, noticias, arte, cultura, actualidad en general y cotilleos; pues eso es lo que me falta, compartir.

Cuando estoy cocinando con la radio puesta y me viene a la cabeza algo que creo es interesante y que podría compartir, lo escribo en el ordenador, y como me he apuntado al feisbuk, lo comparto con la corrala cibernética de familia y amigos.

Ahora me han dicho que sería interesante que hiciera un blog. Pues vamos a ello.

Advierto que son cosas mías, igual hay veces que se me va la olla, son cosas cortitas del día a día y los que me leen hasta ahora dicen que les hace gracia, sólo escribo cuando encuentro algo que me inspira y creo que se puede compartir.

SI ME QUERÉIS, SEGUIDME.

miércoles, 14 de mayo de 2014

COCINEANDO EN PRIMAVERA

Hola de nuevo desde mi cocina, donde paso las mañanas -como dice la madre de mi cuñá- “cocinando pa´ desagradecíos”, pues eso, que tengo calabacines tiernos del campo.

Ya que se acabaron, -qué pena-, las acelgas, las habas y los puerros, ahora es tiempo de calabacines y seguimos con la cocina de temporada. Ayer hice una tortilla con calabacines fritos con mucha cebollita tierna y, menos un poco que comieron mi marido y mi hermana,  el resto tuve pa´ el almuerzo y pa´ mi cena, qué fuerte, qué fuerte, qué fuerte: mi chica se hizo un bocadillo porque dijo que no le gustaba, ¡es que ni la probó! Menos mal que no me pidió que le hiciera otra cosa, porque le pongo la tortilla de boina.

Bueno, pues hoy volvemos a la crema de calabacín, que esa sí se la toma, todo molido, y como tengo algunas amigas cocinillas, os voy a dar un par de mis recetas, -que no son light, por cierto-.

Tengo que advertiros que, menos los que viven conmigo, el resto de la family se lo come todo, hasta las piedras, y todo les gusta. Como yo soy un poco cocinera de rancho, me gusta cocinar para muchas personas y con buen apetito, -nada de puturrú de fuá-, no mido mucho las cantidades, casi todo es a ojo y cuantas más personas para comer, mejor.

Bueno pues pa´ la crema de calabacines, yo pongo una olla con un fondo de aceite y media cebolla gorda a freír y cuando están blanditas, dejo incluso que se agarren un poco al fondo porque así le da más sabor, sin que se quemen, entonces le añado tres o cuatro calabacines cortaditos, lo cubro con agua, una pastilla de caldo y a cocer. Cuando está espesito y todo bien cocido, le añado un brick de nata, rectifico de sal y pimienta al gusto, se muele todo con la batidora y la crema está de rechupete. Para los niños,  con poca pimienta, pero a todo el mundo le gusta, es una verdura que admite quesitos y todo lo que le quieras añadir, lo importante es que antes de molerla quede poca agua para que salga espesita y no se pierdan las vitaminas al tirar el agua. Si tienes pocos calabacines incluso admite zanahoria o patatas.

Bueno, pues ya que comencé con recetas, que creo son fáciles, otra cosa que suelo hacer cuando tengo que limpiar o planchar y no puedo estar pendiente de la olla, es poner un pollo al horno, de los que venden enteros. Lo enjuago bien, le pongo sal y pimienta, y en la barriga le meto un limón o una manzana para que no se estropee al cocinarlo, a la fuente del horno le hago una cama de cebolla, patatas envueltas en papel aluminio y chorreón de vino,  aceite y al horno. Lo pongo antes de nada y con un papel de aluminio por encima para que no se queme y se haga bien por dentro, luego antes de sacarlo, le quito el papel de aluminio y le doy un golpe fuerte para dorarlo, esto tarda mucho tiempo, al menos un par de horas, porque el pollo poco hecho no me gusta nada. Entonces da tiempo de limpiar o en caso de tener visitas, da tiempo de arreglarse para estar presentable en la comida, porque se hace el pollo y la guarnición a la vez.

El horno es amigo mío desde que lo puse en alto, porque cuando estaba en bajo, solo servía para guardar las sartenes y siempre estaba sucio, ahora no me da pereza usarlo.

Para pescado, también venden unas piezas enteras de pescado, que te lo limpian y son frescos, que al horno salen buenísimos, igual que el pollo, y tienes primero, segundo y guarnición, todo en uno, porque tampoco estamos para el engorde. 

El pescado tarda poco en hacerse, y no tiene grasa como el pollo. Una merluza, por ejemplo, sin cabeza ni la espina del centro, se le hace una cama de cebollas y patatas en rodajas, las cuales hay que pasarlas primero por la sartén o el microondas con un poco de sal y aceite para que se pongan blanditas, porque si no quedan crudas, se le hace la cama en la fuente del horno al pescado, sal, pimienta, chorreón de vino blanco y ajos machacados, y si es salmón, que sí tiene grasa, entonces sin aceite y con un poco de eneldo y al horno. ¡Buen provecho!




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