EL POR QUÉ DE ESTE BLOG

EL POR QUÉ DE ESTE BLOG

Bueno, bueno, bueno, pues se explica en pocas palabras: ESTOY EN EL PARO.

Si, después de 34 años trabajando, ahora estoy en el paro y como la cosa me temo que va pa´ largo, pues tengo que fogá, ¿sabéis lo que es eso?, pues que necesito algo que hacer para quemar energía.

Trabajando en hostelería, tratas con todo tipo de personas al cabo del día, clientes y compañeros de trabajo, y si además la mayoría son mujeres, que somos muy charlatanas y llevamos muchos años trabajando juntas, filosofamos mucho de familia, noticias, arte, cultura, actualidad en general y cotilleos; pues eso es lo que me falta, compartir.

Cuando estoy cocinando con la radio puesta y me viene a la cabeza algo que creo es interesante y que podría compartir, lo escribo en el ordenador, y como me he apuntado al feisbuk, lo comparto con la corrala cibernética de familia y amigos.

Ahora me han dicho que sería interesante que hiciera un blog. Pues vamos a ello.

Advierto que son cosas mías, igual hay veces que se me va la olla, son cosas cortitas del día a día y los que me leen hasta ahora dicen que les hace gracia, sólo escribo cuando encuentro algo que me inspira y creo que se puede compartir.

SI ME QUERÉIS, SEGUIDME.

miércoles, 21 de octubre de 2015

SI LA SUERTE FAVORECE A LOS PREPARADOS...

Cuando yo era chica, mi padre era de la mar, pescador, y éramos pobres, muy pobres, como sólo puede serlo quien no sabe cuándo vendrá una buena pesquera para ganar algo de dinero, de noches de mal tiempo y noches de no sacar ni pescado para la casa.
A fuerza de mucho pelearse con mi madre y de hacerle ella el cigarrón en la cama, consiguió que trabajase en tierra; por aquel entonces ya tenía cuatro hijos en el mundo. Cuando mi madre no estaba embarazada, limpiaba y planchaba por horas, porque nunca quiso pedir prestado para pagar más tarde, como le decía mi padre que hiciese y que tenían por costumbre hacer las mujeres de los demás pescadores.  Mientras tanto, todos íbamos al colegio, todos, porque mi madre sabía que la única manera de salir de aquel pozo era preparándose para conseguir un buen trabajo, ya que no se disponía de ninguna clase de renta ni esperábamos ninguna herencia de algún pariente lejano.

Bueeeeno, pues mi padre, por fin, entró a trabajar en el gran hotel Don Pepe, cinco estrellas gran lujo, de ayudante en el servicio técnico, sueldo fijo, pagas extras -que nunca se vieron porque eran para profesores particulares de idiomas y matemáticas-,  y puntos por familia numerosa. Y a pesar de todo, cuando mi hermana la mayor cumplió catorce años,  tuvo que ponerse a trabajar porque con lo que ganaba mi padre no había suficiente para comer. Para comer simplemente, ni hipotecas, ni coches, ni viajes: no había suficiente para comer.

Ahora estoy oyendo al presiente de Caritas denunciar en televisión que a pesar de conseguir trabajo, siguen necesitando ayudas las familias para poder comer, que los sueldos son bajos y precarios.

Tengo a una amiga que trabaja en un hotel en el cual llevan más de cinco años soportando EREs, impagos, no hay subidas de salarios y ya ni se acuerda de la última vez que recibió una nómina completa. En todo este tiempo, el hotel no ha cerrado, siempre tiene trabajo, incluso más este año, que con la crisis del Mediterráneo, con los terroristas asaltando a los turistas,  se ha notado una importante afluencia de gente en los hoteles de España. Y ahora viene lo mejor: la empresa les ha propuesto a los trabajadores que este invierno, como no ven opciones de hacer EREs (ir al paro tres meses), -presupongo que porque han tenido buen año y el gobierno no le va a aprobar las cuentas-, les dicen de trabajar por el tercio del salario y el resto cobrarlo cuando llegue el verano, cuando al mes de noviembre, aún hay personal que no ha cobrado agosto. ¿Es o no es para hacer igual que en Francia y rajarlos?, porque ya no es sólo el miedo al despido, es el desamparo de los trabajadores a la hora de aceptar o no unas condiciones de trabajo que durante cuarenta años eran impensables para este pueblo, que ha organizado huelgas salvajes por los derechos de los trabajadores y que ahora ve cómo políticos y empresarios se dan la mano con sindicatos en cenas y comités, mientras se pisotea a la clase obrera.

Si volvemos a estar como antes de firmar la Constitución Española, será porque a los políticos les interesa, sino no se entiende este retroceso tan evidente en la sociedad.

Y yo lo único que digo es, si la suerte favorece a los preparados, el destino favorece a los valientes.


Estaremos en contacto. We keep in touch, tú ya sabes…